Electroestimulación: la revolución del entrenamiento deportivo

La electroestimulación o estimulación eléctrica muscular es una técnica innovadora que hasta hace poco solo se utilizaba en procesos de rehabilitación y para tratar lesiones. Pero ahora este tipo de entrenamiento se ha adaptado y permite estar en forma con tan solo 25 minutos de ejercicio a la semana. Solo se requiere un espacio apropiado y varios elementos sencillos como pelotas o tiras elásticas, una bicicleta elíptica y tres aparatos electrónicos con cables.

La electroestimulación hace posible que muchas más personas, sean cuales sean sus circunstancias, puedan practicar ejercicio. Lo cierto es que este tipo de entrenamiento ha sido ideado para personas que hacen ejercicio regularmente y quieren seguir progresando, y también para personas que no tienen tiempo suficiente para dedicar al deporte. El objetivo es ofrecer atención individual para que cada persona haga deporte de la manera más eficiente posible. Por tanto, el asesoramiento del entrenador es tan importante como la correcta utilización de las herramientas, pues la tabla de ejercicios y la intensidad del entrenamiento se ajustarán a las necesidades de cada uno.

La estimulación eléctrica muscular ha demostrado su utilidad especialmente en el ámbito de la musculación. Además, las posibles contraindicaciones de este método son mínimas, pues no se recomienda únicamente en personas con algún tipo de problema cardíaco, circulatorio o de epilepsia, también en mujeres embarazadas. Es una práctica natural y no se considera dopante, es de hecho, un complemento perfecto para aquellas personas que ya hacen ejercicio de manera voluntaria. En resumen, los beneficios de la electroestimulación: -          Promete estar en forma con 25 minutos de ejercicio a la semana -          Hace posible que cualquier persona saludable físicamente pueda practicar ejercicio de manera eficaz -          Atención individual y entrenamiento personalizados