¡Toma nota de las claves para mantener un corazón sano!

¿Sabías que las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de mortalidad en el mundo? De hecho, los últimos estudios realizado al respecto las situan, incluso, muy por delante del sida y de cualquier tipo de cáncer. Y es que estamos ante una de las patologías propias de las sociedades occidentales ya que, aunque es cierto que sus factores de riesgo son fácilmente prevenibles, su alcance mundial es muy elevado y crece a un ritmo casi exponencial.

Por lo general, las enfermedades cardiovasculares no producen síntomas hasta que ya es tarde y el paciente sufre un infarto o angina de pecho.

Para mantener el corazón joven y sano, hay una serie de recomendaciones que, de manera sencilla, te ayudarán a que tu corazón no sufra y se mantenga sano y vivo. Al margen de aspectos que no puedes modificar porque no están al alcance de tu mano, como son, por ejemplo, la edad, el sexo o la herencia genética, sí hay variables cuyos efectos negativos puedes evitar. Al hablar de enfermedades cardiovasculares, la prevención es, sin lugar a dudas, la asignatura pendiente.

Hay una serie de pilares fundamentales que, a la hora de prevenir enfermedades cardiovasculares, debes tener muy en cuenta. ¡Toma nota!

1.- Si realizas ejercicios de manera asidua, conseguirás hacerte fuerte ante las enfermedades cardiovasculares, ya que, apostar por un estilo de vida activo, influye en la reducción en la frecuencia y en la mortalidad de las enfermedades cardiovasculares.

2.- Por otro lado, seguir una dieta equilibrada también es una herramienta fundamental. Si consigues comer de una manera sana y equilibrada, conseguirás reducir tres de los factores desencadenantes de las enfermedades del corazón: colesterol elevado, hipertensión arterial y exceso de peso. Apuesta por frutas, verduras, cereales, carnes magras y pescado. Reduce las grasas y el colesterol (carnes rojas grasas, leche entera, quesos elaborados con leche entera, platos a base de crema y postres que contengan mucha grasa) y no olvides meter en tu carrito de la compra aceite de oliva, frutos secos y pescado azul; alimentos todos 100% beneficiosos sobre el sistema cardiovascular. ¡Tampoco olvides introducir fibra en tu dieta, tu organismo te lo agradecerá!

3.- Dejar de fumar y limitar la ingesta de alcohol. El tabaco es uno de los factores más importantes que debes evitar si quieres que tu corazón disfrute de una larga vida. Fumar ejerce un efecto nocivo sobre el sistema cardiovascular, incide en el buen funcionamiento de las arterias coronarias y favorece el riesgo de padecer trombosis. Por lo tanto, no solo se vuelve fundamental ser fumador activo, sino evitar ambientes en los que el tabaco esté presente (tabaquismo pasivo). Por otro lado, y aunque la ingesta de uno o dos vasos de vino tinto al día se ha relacionado con una disminución de enfermedadescardiovasculares, lo cierto es que está demostrado que el abuso de alcohol perjudica gravemente nuestro estado de salud. De hecho, numerosas investigaciones médicas al respecto, han puesto de manifiesto que existe una clara vinculación entre el consumo de alcohol excesivo y la aparición de enfermedades cardiovasculares.

4.- Mantener a raya la diabetes. Las personas aquejadas de esta dolencia forman un grupo de riesgo a la hora de desarrollar enfermedades cardiovasculares. Por ello, es especialmente importante que este colectivo sea capaz de llevar un control estricto de la cantidad de azúcar en sangre, evitando lo que se conoce como complicaciones de la diabetes, en las que, a grandes rasgos, el azúcar en la sangre acaba provocando el deterioro paulatino de las arterias, afectando fundamentalmente a órganos como el cerebro, la visión, los riñones y el corazón.

5.- Revisiones y control médico. La década de los 40 es crucial para evitar el desarrollo de enfermedades cardiovasculares por agentes externos. Así, llegados a esta edad es recomendable realizar revisiones médicas periódicas, especialmente, por aquellos individuos que tienen antecedentes familiares de dolencias cardíacas: hipertensión, colesterol, diabetes, obesidad y tabaquismo. En este sentido, el control de la tensión es muy importante para evitar que nuestro corazón sufra. Por ello, y además de acudir al médico de manera frecuente para realizarnos chequeos médicos completos, es muy recomendable contar en casa con un tensiómetro que, de manera sencilla, nos permita controlar nuestra tensión para evitar sorpresas a nuestro corazón.