Publicado el : 04/03/2020 08:27:16
Categorías : Queraltó enseña , Salud y calidad de vida , Últimas noticias
Un colchón antiescaras es aquel que se fabrica para tratar o prevenir las UPP (Úlceras Por Presión) o escaras. Este tipo de colchones antiescaras, SEMP (Superficies Especiales de Manejo de Presión) están indicados para personas que deben pasar largos periodos de tiempo en cama. Son hinchados gracias a un compresor de forma que reparten el peso del usuario sobre la superficie del colchón para aliviar presiones sobre los principales puntos de apoyo. Además de evitar así la aparición de escaras, ayudan a su curación en el caso de que ya existan.
En el momento de elegir un colchón de aire antiescaras es muy importante tener en cuenta diversos aspectos, tales como la función que desarrolla y cuáles son nuestras necesidades.
Los colchones para tratar o evitar las llagas, úlceras o escaras se clasifican en función de su gravedad. Para cada uno de los 4 niveles de gravedad en los que se clasifican las escaras existe un tipo de colchón distinto para su tratamiento:
Este tipo de colchón antiescaras está indicado para evitar la aparición de escaras tras pasar largos espacios de tiempo en la misma posición. Es el módelo más básico y se compone de una serie de serie de celdas o burbújas que se van inflando y desinflando continuamente a través de un compresor, ayudando a mejorar la circulación. En este caso, el cochón servirá como sobrecolchón, es decir, deberá colocarse encima del colchón principal, bajo las sábanas.
Formado por tubos que se hinchan y deshinchan de forma alterna. Este modelo de colchón de aire antiescaras se destina a pacientes que ya tienen úlceras pero no demasiado graves (grado de UPPs 2). Ayuda a mejorar la circulación sanguínea y a sufrir menor fricción en las partes del cuerpo más prominentes (puntos de apoyo). Se trata al igual que el anterior caso de un sobrecolchón.
De diseño similar al anterior pero destinado a pacientes con UPPs grado 3, aliviará el dolor del paciente reduciendo la presión. Este tipo de colchón antillagas no necesita ser colocado encima del colchón principal, pues dispone de una base que lo sustenta.
Recomendados para pacientes con riesgo alto a padecer escaras o con UPPs grado 4, estos colchones para enfermos encamados participan en su curación reduciendo el dolor gracias a la alternancia de aire en sus celdas tubulares. Al igual que el anterior tipo, no necesita ser colocado encima de otro colchón.