Ayudas para vestirse y desvestirse

En salud siempre se intenta dar un paso más. Hoy en día nos encontramos con un gran porcentaje de la población de edad avanzada pero que busca conservar su autonomía e independencia en la mayor medida posible. La creación de nuevos productos que hagan más fácil las tareas diarias, como vestirse, calzarse, comer, etc., es un interés constante para aquellos que nos dedicamos al mundo de la salud.

Podemos encontrarnos con ayudas para calzarse,

así como ayudas ortopédicas para vestirse y otros muchos productos.

Además, para aquellas personas que han sufrido algún tipo de daño cerebral, es muy común que necesiten adaptar su entorno a las capacidades y necesidades de las personas que lo sufren. Incluso para aquellas personas que sufren algún tipo de enfermedad y ven sus habilidades, tanto motrices como cognitivas, mermadas.

Con este tipo de elementos se busca que la persona se sienta con mayor autonomía y con mayor motivación, un factor extremadamente importante para situaciones difíciles.

Una clara definición de lo que entendemos por “ayudas para la vida diaria” sería: "cualquier producto, instrumento, equipo o sistema utilizado por personas con discapacidad para compensar, mitigar o neutralizar la deficiencia, discapacidad o minusvalía, permitiéndoles alcanzar un mayor grado de dependencia en las actividades de la vida diaria y proporcionándoles en general una mayor calidad de vida”.

Por lo tanto y para resumir, toda ayuda técnica debe reunir las siguientes características: Sencillez, eficacia, ser utilizada cuando no existe otro medio, seguras, evitando riesgos innecesarios, responder a las necesidades para las que han sido concebidas, materiales resistentes, de fácil limpieza y de bajo coste.

Finalmente, y después de hablar un poco sobre las posibilidades que ofrecen los productos de “ayudas para la vida diaria” me gustaría compartir una frase que, aunque directa, la considero muy realista:

"En el único lugar donde encontrarás la palabra Éxito sin trabajo, es en el diccionario"

Y muy importante: todos estos elementos son una ayuda para que los usuarios se sientan más autónomos. Por ello, me gustaría añadir “dejen que disfruten de su autonomía y se fortalezcan para conseguir sus metas de recuperación o de superación”.

Un buen cuidador apoya pero deja, en la medida de lo posible, que la persona se realice y sienta que sus habilidades le permiten un cierto control de su vida.

Aquí os dejo con una infografía muy representativa.

¡Hasta la semana que viene!

Y como decimos en todos nuestros vídeos: ¡buscamos vuestra felicidad! :-)